viernes, 25 de marzo de 2011

ASEVERACIONES

Posa la hoja
cansada de altura
también
hay gozo en lo llano
también
hay color en la muerte
también de soledad
se nutre la tierra.

Ningún pájaro en otoño
cambia canto por lloro.

Lucía Borsani.

sábado, 19 de marzo de 2011

SÚPER LUNA

Los informes del cielo anuncian a la selecta invitada para el escenario de las 18.38, en la gran fiesta del cielo uruguayo. Y se han empecinado en anunciarla luminosa, tanto, que un cónclave de poetas espera conocer sus galas.
Seguro justo se asoma entre los brazos del pino como bailando el vals de los enamorados. Es probable que los pájaros no quieran acostarse temprano.
Los soñadores y románticos, abstenerse de ordenadores ni teléfonos celulares. Rige la contemplación.
Y ella no quiere fotos, sino paparazzis desesperados por admirar su modelo pura platería, sin lente intermediaria.
La Súper Luna ha renunciado a darle paso a las estrellas y se ha atiborrado de joyas para mostrar su desparpajo. Dicen que no tiene edad ni arrugas en su pasaporte, ni historias más que las que algunos locos han testimoniado. Hay grandes posibilidades de que se le caiga el pañuelo de un verso y el poeta más inspirado opte por alcanzárselo, convertido en poema. Y ni hablar de los enamorados, porque corren el riesgo de renunciar a temas terrestres por mucho rato...

sábado, 12 de marzo de 2011

IRREVERENCIAS DEL POETA

Traicioneramente, la luna se ha escondido entre las mantas de las nubes argumentando frío de inspiración. Y se me da la gana, Señora, de desafiar esas pocas ganas de trabajar con más de las mías, aunque estos dedos — nerviosos por naturaleza— se empecinen en llegar al teclado para hacer travesuras.
Nada esta noche me conmueve más que su intento de evasión, lunática musa.

Pero para un escriba la noche más oscura también ofrece luz de letras. Y no hay mayor diferencia entre oscuridad y plenilunio de poesía.
Lástima que el poema, como gato enamorado, se me haya escapado por algún tejado.
No, no acepto ni un ápice de sonrisa entre esos cráteres algodonosos de esta noche. Ni un resoplido en mis oídos de este viento que se cuela por la ventana.
Nada ni nadie, repito, podrá conmigo. Los dedos, a punto de caer rendidos, preparan el punto final para mi suspiro.

sábado, 5 de marzo de 2011

TU SED

A veces me desnudas
y me llevas
a la cama de tu sueño
tallada para mí
un gran desierto quisiera
sin pisadas
y en esas noches de estío
muerto de sed
no dices nada
nada razonas
no inventas máscaras
tan solo trepas a mis dunas
y me pides agua.

Lucía Borsani /Loca por la luna