Ví la luna por primera vez un cinco de noviembre del siglo pasado en Uruguay. Quedé poeta.
domingo, 25 de mayo de 2014
RESPONSABILIDAD
Fernando se pasaba las horas esculpiendo ovejas hasta ser vencido por el sueño. El problema apareció en la primavera, cuando al nacimiento de los corderos le siguió la esquila gubia en mano y el peligro inminente de convertir la lana en un colchón de verdad.
L.B. / A publicarse en la antología del I Concurso de microrrelato "La primavera, la sangre altera" de Diversidad Literaria. (Gracias).
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