El
personaje, un conejito cuyo nombre no recuerdo, desplegaba sus
aventuras ahí adentro, en el mismísimo óleo, con el milagroso suceso
de no estar pintado siquiera.
Pero ninguno de los sobrinos cuestionó alguna vez a la abuela por no pintarlo, ni a la tía, por hacerlo el actor principal.
¿Quedarán
tías Beba, alejadas de los ordenadores y otros aparatos electrónicos,
dispuestas a inventar historias inolvidables para sus sobrinos de
frente a un cuadro?
¿Quedan sobrinos que visiten a sus tías y esperen la hora del cuento como el momento de máxima fantasía a disfrutar?
En mi corazón a partir de hoy tendrá un lugar especial, el de los puros de corazón, porque me enseñó a imaginar y también a vivir con el corazón en la mano, dispuesto siempre a servir. Gracias tía Beba, madrina, por todo y por tanto. Disfruta tu Nueva Vida, merecida en la Luz.
Lucía Borsani./ Sobre imagen de autor desconocido (Fuente Internet).
Sin palabras, no tuve suerte de conocerlas pero si de hacerle a una una pequeña broma anunciandote como la "madre de mis hijos"... je, ¿te acordás?
ResponderEliminarEstan juntas riendose y mirando para abajo...
Si de algo estoy segura es que están juntas y riéndose, porque así fueron "las" Borsani, y así somos sus sobrinos...
ResponderEliminar"Las" y "los" Borsani, corrijo.
EliminarUN HOMENAJE MUY SENTIDO, NOSTÁLGICO Y LLENO DE INFANCIAS.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Y como puede comprobarse ,hicieron bien su trabajo tanto la abuela como la tía. Los mejores juguetes solo se encuentran en la imaginación de un niño y nunca se olvidad en el trastero de las cosas inservibles.
ResponderEliminarMe alegra tu vuelta.
Dos abrazos uno para ti y el otro para el primer comentarista.
Seimpre habrá alguien que nos meta con fascinación en el cuento de los libros, y con quien se vivirá eternamente agradecido de no haber cejado en el intento de ensoñarnos con la palabra escrita. UN abrazo grande. Carlos
ResponderEliminarQuedan. Sin ir más lejos mi madre con mis hijos, sus nietos: les cuenta historias aunque sin el cuadro. No obstante la escena que dibujas es tierna hasta decir basta. Y mira, lo hiciste tirando de un pc y yo, a unos miles de km de distancia, he disfrutado con tu narración como un enano. A veces, sólo a veces, este mundo en binario tiene sus pasadizos mágicos hacia la ilusión y las cosas dulces y bien hechas. Enhorabuena.
ResponderEliminarUn beso
Gracias por las visitas, los comentarios. Ha sido mi humilde homenaje a la tía en su inesperada partida. Cariños a todos.
ResponderEliminarLa encontré!!!, jajajaja
ResponderEliminarUn beso